LLORA LA DIGNIDAD.
El 8 de octubre, el Presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, cometió una gran infamia. Incrementó en 50% el salario de cerca de 2.000 altos funcionarios entre ellos congresistas, ministros y Jefes de organismos de control como el Procurador General de la Nación. Es decir, hizo pasar de 16 a 24 millones de pesos, los sueldos de estos controvertidos personajes. Un gasto para la nación de 192.000.000.000 (Ciento noventa y dos mil millones al año) sin contar que esta generosidad del Presidente eleva en un 33% las prestaciones sociales de los beneficiados. Lo que cuestan los semestres de 100 mil estudiantes de ese 88% que termina el bachillerato y se queda sin poder estudiar.
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