jueves, 4 de abril de 2013

Isla Barú será el nuevo hogar de 50 aves víctimas del tráfico de fauna silvestre

La Secretaría Distrital de Ambiente (SDA) se encargó de rehabilitarlas y curarlas. Partirán mañana desde el Centro de Recepción de Fauna Silvestre de la SDA, donde pasaron largos periodos de recuperación.

SDA, abril 3/2013. - El Aviario Nacional de Cartagena, ubicado en Barú, una de las islas del Rosario, será el nuevo hábitat de 50 aves silvestres que fueron decomisadas por las autoridades ambientales y policivas en diferentes operativos de control en Bogotá.

Los animales partirán mañana jueves 4 de abril desde el Centro de Recepción de Fauna Silvestre de la Secretaría de Ambiente, entidad que se encargó de rehabilitarlos,  rumbo a la ciudad de Cartagena.

Se trata de 10 canarios costeños, 9 pericos aliazul,  7 cascabelitos, 7 chelas azules, 2 mirlas blancas,  2 chamones, 2 mochuelos, una guacamaya cariseca, una lora frentirroja, una cotorra frentirroja, una pava de monte, una pava caucana, un cacique cabecinegra, un semillero, un semillero ventiblanco, un azulejo, una cheja negra y un chirrio.

Según la Secretaría de Ambiente,  los animales pasaron largos periodos en el Centro de Fauna, en donde fueron curados, alimentados y valorados por los biólogos y zootecnistas de la SDA.

Ahora, los animales serán parte de la exhibición del Aviario, un sitio muy visitado por turistas extranjeros y nacionales.

Allí, además de disfrutar de un clima más apto y consumir alimentos como frutas y comida de sus ecosistemas nativos, expertos del Aviario realizarán actividades de educación ambiental sobre el impacto que sufren los animales al ser sacados de su hábitat natural.

Según Carmen Rocío González, subdirectora de silvicultura, flora y fauna de la Secretaría de Ambiente, este grupo de animales no puede ser liberado en su hábitat natural debido a las secuelas que sufrieron al tratar de ser comercializadas.

“Muchos de estos animales llegaron sil plumas, desnutridos y hasta domesticados, razón por la cual no pueden volver a sus ecosistemas naturales, ya que no sobrevivirían. Sin embargo, en el Aviario de Cartagena vivirán en condiciones similares a las de sus ecosistemas nativos”.

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