Santa Fe, San Cristóbal, Engativá, Barrios Unidos, Los Mártires, Antonio Nariño y Rafael Uribe Uribe son las localidades que albergarán los nuevos centros orquestales de la ciudad. Estos espacios de formación musical gratuita para niños y jóvenes entre los 7 y 17 años han sido claves para el desarrollo cultural de la capital. “Con este proyecto estamos llegando a jóvenes que no tenían la oportunidad de integrarse a proyectos artísticos”, resaltó el Secretario Distrital de Gobierno, Miguel Uribe Turbay.
Las localidades de La Candelaria, Bosa y Teusaquillo cuentan actualmente con la actividad académica de los centros orquestales. En Tunjuelito, Chapinero y Usaquén se está poniendo en funcionamiento nuevamente este proyecto que surgió el 12 de junio del año pasado mediante el Acuerdo 594 del Concejo de Bogotá.
“Hemos visto, durante estos seis meses, como la Orquesta Filarmónica de Bogotá, OFB, ha venido conquistando, cada vez más, nuevos espacios de la capital. Esperamos que muy pronto sean los jóvenes de estos nuevos centros los que tengan la posibilidad de presentarse en diferentes localidades”, agregó Uribe Turbay.
Manuel Calderón, alcalde de La Candelaria, destacó que estos escenarios son fundamentales para el crecimiento de los adolescentes, pues allí ocupan el tiempo libre en prácticas sanas y de gran valor para su futuro. “La música es un catalizador que reduce significativamente la violencia”, precisó. El centro orquestal de La Candelaria acoge actualmente a 90 niños. Con ellos se han desarrollado varios conciertos en la Catedral Primada de Bogotá, colegios vecinos y hasta la misma Alcaldía Local. “Queremos que la orquesta se convierta en una de las muestras más representativas del quehacer cultural de la localidad”, añadió Calderón.
En el mismo sentido se pronunció Mayda Cecilia Velásquez, alcaldesa de Usaquén, donde se está reactivando el centro orquestal que espera albergar a más de 350 niños. “Acercarse a la música genera en los más pequeños hábitos de estudio, disciplina, puntualidad, mayor responsabilidad y continuidad. De ahí la importancia del proyecto”, destacó.
Ejemplo de dicha constancia son dos jóvenes de las localidades de Teusaquillo y La Candelaria, quienes ahora integran con gran éxito la Orquesta Filarmónica Prejuvenil de Bogotá. “Empezaron sin saber tocar un instrumento y gracias a la disciplina, el empeño y el gusto por la música han logrado destacarse en su campo”, indicó Xavier Ramos, coordinador de los centros orquestales de la OFB.
Se espera que a diciembre de este año, 1.800 niños y adolescentes sean beneficiarios activos de este proyecto, articulado en el Sistema de Integración Artística y Cultural de la ciudad. Asimismo, la OFB, quien desarrolla el proyecto a través de un convenio administrativo con el Fondo de Desarrollo Local, tiene proyectados 30 conciertos durante el segundo semestre de 2016, con estos jóvenes a la cabeza, para el disfrute de todos los capitalinos.
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