8.554 vehículos se “rajaron” en contaminación atmosférica en 2012

Las Secretarías de Ambiente y Movilidad del Distrito y la Policía de Tránsito revisaron un total de 58.807 vehículos, entre particulares y de servicio público. De este total, el 85 por ciento pasaron las pruebas de emisiones atmosféricas.

SDA, enero 4/2013.- A diario, las principales vías capitalinas cuentan con varios puntos de control para monitorear los vehículos chimenea, principales causantes de la contaminación de polvo, hollín y humo (material particulado).

En 2012, las Secretarías de Ambiente y Movilidad y la Policía de Tránsito revisaron 58.807 vehículos particulares y de servicio público, de los cuales 8.554 no pasaron las pruebas de emisiones atmosféricas.

Es decir, que el 14,5 por ciento del total de revisados se “rajaron” en contaminación atmosférica, por lo cual fueron multados con 15 salarios mínimos legales diarios vigentes.

912 de estos vehículos fueron inmovilizados, mientras que se impusieron 4.804 comparendos.

Sin embargo, el panorama no es negativo, ya que el 85 por ciento (50.175 vehículos) pasaron las mediciones de opacidad (en el caso de los diesel) y los análisis de gases (para automotores con combustible a gasolina, gas natural o motos). 

Cuando un vehículo es detenido en vía, la Policía de Tránsito verifica que el conductor porte el Certificado de Revisión Técnico-Mecánica de Gases, que debe estar vigente. Si no lo tiene o está vencido, el automotor es inmovilizado y el conductor recibe la multa de 15 salarios mínimos legales diarios vigentes.

Si tiene al día el certificado, el vehículo es sometido a una inspección visual por parte de la SDA, que consiste en: verificar que no existan fugas del tubo de escape, porte y estado del silenciador, tapas de llenado de aceite del motor y del tanque de combustible, que no tenga salidas adicionales, temperatura adecuada de operación y que no cuente con emisiones visibles de humo negro o azul por más de 10 segundos consecutivos.

El castigo para los que no pasan esta segunda parte de la prueba es la inmovilización y los 15 salarios diarios.  

Los que pasan tienen que someterse a la tercera parte de la prueba con equipos, que consiste en un profundo análisis de gases. Si se “raja” en alguno de los niveles permisibles de emisión, también se aplica la sanción.