El instituto
Nuestra señora de la Sabiduría para Sordos (INSABI), dentro de los actos de conmemoración de sus 90 años de
existencia, tiene previsto para el día viernes 25 de abril, desarrollar con los
estudiantes sordos de la institución, en el parque del barrio Country sur
(calle 29 sur carrera 11), desde las 08:00 am., diversos actos culturales, acompañados de comparsas.
La Institución dirigida
por la Hna. Hilda María Velázquez invita a la comunidad a participar de estos
actos con los que se busca fortalecer la Institución, para continuar con la
obra que iniciara el Dr. Eduardo Santos en el año 1939, cuando colocó la
primera piedra de la institución en el predio por él donado.
El Instituto es
administrado por la comunidad de las Hijas de la Sabiduría, religiosas de
origen francés dedicadas a la educación y formación de la persona con pérdida
auditiva, de los estratos cero, uno y dos, población doblemente vulnerable por
pertenecer a estratos socio-económicos bajos, y adicional a ello su condición de
discapacidad.
Han sido galardonados, por
los diferentes proyectos que desarrollan en pro de la calidad académica de los
estudiantes, bajo programas específicos para las personas con pérdida auditiva
sin dificultades asociadas, para pérdida auditiva con déficit cognitivo
(discapacidad intelectual) asociado, para estudiantes oralizados con implante
coclear y adicionalmente en programas para la formación para el trabajo en metal-mecánica, corte-confección, tejidos y ebanistería, para el cual establecieron
un convenio con el SENA.
Cuentan con un grupo de profesionales idóneos conformado
por licenciados en las diferentes aéreas académicas, equipo de fonoaudiólogos, educadores
especiales, audiólogo, psicólogo, enfermero y médico entre otros; en instalaciones
con capacidad para 1000 estudiantes.
La institución se venía sosteniendo económicamente para
la prestación del servicio a la persona sorda, con un aporte anual que enviaba la
congregación en Roma y adicionalmente a un convenio con la Secretaria de
Educación del Distrito vigente desde el año 2002 renovado anualmente hasta el
2012, pero suspendido durante el año 2013; y reanudado en el año 2014, con
algunas restricciones, ya que la SED (Secretaria de Educación del Distrito),
cubre dentro del contrato establecido única y exclusivamente a los estudiantes
que habían estado en convenio en el año 2012, más no a los estudiantes nuevos
que asumió el instituto en el año 2013, ni a los que solicitan cupo en la
actualidad por primera vez.
Esta restricción se plantea a pesar de que INSABI ocupó
el primer puesto en cuanto a calidad entre los colegios que ofrecen educación
para personas en condición de discapacidad y el tercer puesto a nivel
distrital, según evaluación efectuada por la Secretaria de Educación Distrital
para el proceso de Banco de Oferentes del año 2014.
Actualmente la congregación tiene dificultades para
proveer el recurso económico anual que venía proporcionando, debido a que en el
año 2013 tuvo que proveer el 100% del aporte para INSABI en Colombia y
adicionalmente a causa del terremoto de Haití, en el que tres de nuestras obras
fueron seriamente afectadas y requieren prioritariamente el apoyo económico.
Por lo anterior, en el año 2013 adquirimos una deuda
significativa con el fin de continuar prestando los servicios a la población
sorda, ya que padres de familia y estudiantes se negaron a abandonar la
institución y a ser reubicados en diferentes colegios del distrito, entre otros
factores, debido a que los sordos usuarios de la Lengua de Señas Colombiana son
una comunidad minoritaria que requiere de su aglutinamiento para el
fortalecimiento de su lengua, de su identidad, de su cultura y costumbres,
siendo simultáneamente preparados para la inclusión con la comunidad
mayoritaria oyente a nivel laboral en empresas en donde hacen sus pasantías
para obtener el grado de bachilleres técnicos de nuestra institución y en donde
por lo general son contratados posteriormente.
La comunidad religiosa recurre a la comunidad con
capacidad de gestión, diligencia, conciencia social y espíritu altruista para
que apoye esta institución, con el fin de lograr un punto de equilibrio
económico y así seguir respondiendo a la calidad en la educación para esta
comunidad minoritaria.
Deseamos continuar proporcionando empleo a
aproximadamente 60 funcionarios que aman su trabajo y han dedicado su labor a
la calidad de vida y educación del sordo.
Por esta preocupación se recurre a la comunidad para hacer posible se de continuidad
a esta obra de 90 años de servicio. Manifiesta la Hna. Hilda María Velázquez “Soñamos
con poder recibir a cada estudiante sordo que acuda a nuestra institución y
solicite un cupo, sin restricción alguna y sin la barrera económica para
garantizarle un servicio de calidad”.
1 comentario:
Buenos días. El Instituto dicta cursos a personas oyentes?. Gracias
Publicar un comentario