Mañana miércoles, la Corte Constitucional definirá la adopción para las parejas del mismo sexo.

El abogado de Ana y Verónica (pareja de mujeres lesbianas de Medellín a quien la Corte les concedió la adopción conjunta de la hija biológica de una de ellas), GERMAN HUMBERTO RINCON PERFETTI presenta sus consideraciones:

CON RELACION A LA OPOSICION DE LA IGLESIA CATOLICA: “Las  jerarquías de la Iglesia Católica no tienen poder moral para opinar sobre este tema. Es de público conocimiento que la mayoría de ellos son homosexuales, han sido nuestros amantes quienes en lo público nos denigran, pero en lo privado nos llamas a sus sábanas”.

CON RELACION AL DERECHO PREVALENTE: “para este caso deben prevalecer los derechos de los niños y niñas, quienes merecen tener un hogar, ya sea ofrecido por personas homosexuales solteras o parejas del mismo sexo, quienes queremos ofrecer nuestro afecto, cariño, tiempo y patrimonio para permitirle un proyecto de vida digno a quienes están esperando ser adoptados. Curiosamente personas y parejas homosexuales tienen la tendencia de adoptar a niños y niñas de difícil adopción”

CON RELACION A LOS DERECHOS DE PERSONAS Y PAREJAS HOMOSEXUALES: “Las personas lesbianas y gays seguimos siendo tratadas como ciudadanas de tercera categoría, mientras que un hombre o mujer heterosexual no son cuestionados para adoptar, nosotras y nosotros si, constituyendo este asunto una exclusión innecesaria y sin justificación. Una verdadera democracia debe garantizar derechos de primera categoría a todos sus ciudadanos”

CON RELACION A LOS ATAQUES FUNDAMENTALISTAS Y RELIGIONES:” La investigación científica ha demostrado que los niños y niñas que viven con personas o parejas homosexuales tienen los mismos inconvenientes y virtudes de quienes viven con personas heterosexuales, razón por la cual no hay ningún riesgo. En mi caso, mi padre y madre eran heterosexuales y yo soy gay, razón por la cual la orientación sexual de las personas no se toma del modelo paterno o materno, pero aun cuando un menor llegue a ser lesbiana o gay, serán –conforme la Organización Mundial de la Salud- tan normales como su padre gay o su madre lesbiana. Los miedos fundamentalistas no entienden razones y pretenden que 45 millones de personas estemos sujetas a sus creencias particulares”