Febrero 25 de 2016. Lucy Chois, como le dicen de cariño, es una bogotana que vive en la localidad de San Cristóbal y quien dedica gran parte de su tiempo a realizar programas gratuitos con la población de adultos mayores de la zona. Todos los martes, como desde hace tres años, desarrolla en su casa actividades propias de una huerta: siembra y cosecha; los jueves da clases de aeróbicos y meditación en el Centro Comunitario La Victoria.
De 8:00 a.m. a 11:00 a.m. Lucy es la profesora de estos abuelos, los enseña a estar en contacto con la tierra y a reciclar botellas, de esta manera, los asistentes se distraen con otras actividades, con las cuales ejercitan sus manos y mejoran su movilidad y motricidad mientras disfrutan de espacios alternativos, de esparcimiento y de compartir con los demás, siendo ésta una de las mayores necesidades de los abuelos. Por su parte, el tiempo de los ejercicios es apoyado por instructores y recreadores del Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD).
Su labor comunitaria arrancó en el año 2000, cuando por cuestiones de salud tuvo que buscar otros espacios para su desarrollo laboral diferente a la oficina. Durante esta búsqueda llegó a un sitio dirigido por la escuela de enfermería de la Universidad Nacional, donde se capacitó como líder para hacer trabajo comunitario e hizo un diplomado en desarrollo de trabajo con las personas mayores.
“Durante todo un año me capacité para solucionar con ejercicios, charlas y meditación, problemas relacionados con la salud en esta población. En el proceso me dirigieron danzas, ejercicios, aeróbicos y salidas pedagógicas y recreativas, todo esto es lo que hoy en día aplico con mis abuelos”, cuenta Luz Esperanza Chois.
Con 10 abuelos comenzó su trabajo comunitario, actualmente tiene más de 60 personas que han llegado a través del voz a voz de los beneficiados, gracias a la satisfacción y beneficios obtenidos con la labor de esta mujer, en este grupo hace aproximadamente siete años. En diálogo con Bogota.gov.co Chois narra con gran emoción el caso de Diego, uno de sus alumnos. “Él fue uno de los primeros que llegó a mi grupo, es uno de mis pioneros. Sufría de asma crónica y tenía que andar siempre con oxígeno, recuerdo que siempre sentado participaba en las actividades de manera muy pasiva, pero era tantas sus ganas de participar que con su constancia, pasión y disciplina salió adelante en menos de un año y en estos momentos necesita del oxígeno solo en las noches”.
“El caso de Diego es una de las más grandes alegrías que he tenido en el grupo, verlo así de recuperado y de independiente, a sus 69 años de edad, caminando por todos lados y con permanente buen estado de salud me llena de satisfacción”.
Dice que las puertas de su equipo de trabajo están abiertas para cualquier adulto mayor interesado, que los únicos requisitos que debe cumplir son: que puedan hacer actividad física, que puedan movilizarse de manera independiente, que estén afiliados a una EPS o al Sisbén y que puedan llegar a las actividades por sus propios medios.
La valoración la hace ella a través de una entrevista y así conforma su base de datos para tener en cuenta la situación y condición individual de cada alumno. Al listado le adjunta copia de afiliación de su servicio de salud y datos de un acudiente al que se le pueda llamar en caso de ser necesario.
“Mi gran propósito con este trabajo es mejorar la salud de los abuelos, ellos se mejoran con el contacto de la tierra, al hacer una caminata, con el solo hecho de decir que van a hacer ejercicio. El poder compartir con personas de su misma edad es de gran beneficio y provecho para su salud. Participar de todas mis actividades es para ellos como un paseo”, afirma la profe Chois.
Lucy asegura que esta labor se sostiene en conjunto con sus aportes y los de los abuelos, y con alguna que otra donación e invitación. “Por ejemplo, los cumpleaños de mis alumnos los celebro cada dos meses. A veces, la comunidad y conocidos donan insumos, semillas y refrigerios y de vez en cuando, instituciones ambientalistas invitan a mis abuelos a participar en salidas y caminatas”.
“El anhelo de mi corazón es que mis abuelos disfruten de todo y de cada día. Nuestro eslogan es: ‘Nosotros no somos viejos por los años que tenemos detrás de nosotros, si no por los pocos años que nos quedan de vida’, basada en esta frase, lo que trato de hacer con ellos es que vivan cada momento al máximo, aportando de esta manera a su bienestar y a su salud. También le apuesto al tema ambiental, trabajando en equipo para enseñarles a recuperar el sitio y entorno de cada uno”, dice Chois.
Para quienes quieran unirse a la causa de esta mujer, como voluntario, patrocinador o alumno, puede comunicarse a través del correo electrónico choluz@hotmail.com , por facebook como Redamigosdel Zuque o como Lucy E. Chois o al número de celular 313 468 17 05.
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