Tráfico vehicular, principal protagonista
· La Secretaría Distrital de Ambiente (SDA) midió los niveles de ruido en esta troncal. El resultado no es alentador, ya que se registraron entre 68 y 81 decibeles, en una vía donde por mucho deberían registrarse 65.
· Hoy y mañana, la SDA capacitará a los dueños de bares para que mitiguen el ruido en sus establecimientos.
SDA, mayo 29/2011.- Con el propósito de conocer el panorama de ruido en la calle 26, por donde próximamente pasarán los buses rojos de TransMilenio (TM), la Secretaría de Ambiente se armó de sonómetros y su Unidad Móvil de Ruido y se tomó 56 puntos en cuatro sectores de esta troncal, entre el aeropuerto ElDorado y la carrera 30.
El resultado no dejó bien parada a la 26, ya que se registraron entre 68,2 y 81,6 decibeles, cuando la normatividad ambiental sólo permite en un corredor vial como este (vía V-0 de mínimo 100 metros de ancho) 65 decibeles en el día y 60 en la noche en algunos sectores considerados residenciales.
De los cuatro tramos evaluados el más crítico fue el 4, entre la avenida 68 y la carrera 30, con un promedio de 79,2 decibeles (mínimo 73,7 y máximo 81,6). En esta zona la SDA realizó 12 mediciones, en sitios concurridos como la Registraduría Nacional, la Gobernación de Cundinamarca, el centro comercial Gran Estación y el monumento a los Militares Caídos.
El segundo tramo más crítico fue el 3, que comprende la 26 entre la avenida Boyacá y la avenida 68. Según la SDA, el promedio de ruido en los 14 puntos evaluados fue de 78,8 decibeles (mínimo de 72,1 y máximo de 80,2). Esta zona comprende lugares como el colegio Don Bosco, la Cámara de Comercio de Bogotá y los hoteles Cheraton y Marriot.
Los 16 puntos del primer tramo (entre el aeropuerto ElDorado y la avenida Ciudad de Cali) registraron 77,4 decibeles en promedio, y los 14 del tramo 2 (entre la Ciudad de Cali y la avenida Boyacá) 76,1 decibeles.
Cada punto de medición se tomó a una distancia de 250 metros, de acuerdo con lo establecido en la Resolución 627 de 2006.
La SDA aseguró que el alto tráfico vehicular, tanto de transporte público como particular, es el gran protagonista del ruido de la calle 26, el cual con la entrada de los articulados de Transmilenio se espera que disminuya.
Los principales puntos críticos por el ruido de los vehículos se encuentran en las vías de acceso a sitios de interés como la Terminal de Transportes, las sedes de dependencias del gobierno del CAN, la embajada de los Estados Unidos, el ingreso al aeropuerto ElDorado, y la conexión con otras vías importantes como la carrera 30, las avenidas 68 y Boyacá, y la carrera 50.
Dueños de bares mitigarán su ruido
Según datos de la Secretaría de Ambiente, el 60 por ciento de las quejas que llegan a la entidad por el tema de ruido están relacionados con la “estridencia” de establecimientos como bares, tabernas, discotecas y tiendas con rockolas, que se caracterizan por el expendio de bebidas alcohólicas.
Para mitigar esta problemática, la Secretaría de Ambiente realizará una serie de capacitaciones para que los dueños de estos establecimientos bajen el volumen los días 29 y 30 de mayo en el auditorio de la SDA (Avenida Caracas No. 54-38).
Se espera la asistencia de los negociantes pertenecientes a la Asociación de Empresarios de Bares (Asobares), además de cualquier dueño de este tipo de establecimientos que quiera mitigar su problemática.
La SDA mostrará ejemplos de mecanismos de control de ruido exitosos, con el propósito de que los empresarios los apliquen en sus bares. Luego, realizará visitas técnicas en diferentes zonas de la ciudad para verificar en cumplimiento de la normatividad ambiental.
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