sta
especie que se creía extinta florece en la actualidad en el Jardín
Botánico José Celestino Mutis de Bogotá.
Passiflora
cremastantha
/Foto Carlos Forero/JBB
La
conservación y la propagación de las especies son dos conceptos que
definen en gran medida el sentido de una disciplina como la Biología
y las ciencias que se derivan de ella.
Gustavo
Morales, biólogo e investigador de la Subdirección Científica del
Jardín Botánico José Celestino Mutis logró lo que parecía una
empresa perdida y fue que la Passiflora
cremasthanta,
que se creía extinta, floreciera y diera frutos. Sólo hay un lugar
en el mundo donde ocurre este acontecimiento en la actualidad y es el
Jardín Botánico José Celestino Mutis de Bogotá.
La
Passiflora
cremasthanta
fue descrita en 1922 por el botánico Harms. La descripción de la
especie está consignada en Repert. Sp. Nov: 18:294.1922, tal como
aparece reseñado en el libro de la Flora
de Colombia: Passifloraceae
de la bióloga estadounidense Linda K. Escobar en 1988, quien señala
lo siguiente: “Sólo se conoce del espécimen tipo, a pesar de
haber efectuado varios viajes a la localidad tipo y las áreas
aledañas. Es posible que planta de esta especie ya no exista.”
Desde
que fue encontrada en el Alto de Pasares de Guanacas, Cauca, lugar de
donde proviene la descripción de Harms, no existe otro registro que
constate la existencia de este especie ni en Colombia ni en ningún
otro lugar del mundo. La colección de referencia responde al rótulo
de F. C. Lehmann 5421, quien
al parecer entre
finales de 1800y principios de 1900 colectó el material y lo envió
a herbarios de Norteamérica y Berlín.
Su
redescubrimiento, el 20 de diciembre de 2008, tuvo lugar en una casa
ubicada en la vereda Mundo Nuevo, municipio de La Calera,
Cundinamarca, por un grupo de investigadores del JBB, liderado por el
profesor Morales. La familia que allí habitaba no la tenía por su
belleza, sino por lo sabroso de su fruto, que tiene el aspecto de una
curuba, y está lleno de pequeñas semillas.
En
ese lugar Morales recolectó material de herbario y frutos para
extraer semillas, y empezó la indagación que posteriormente
confirmó el hallazgo.
Ha
sido una labor difícil rescatarla, señala Morales, “varias veces
pusimos a germinar semillas y obtuvimos plantas, pero la viabilidad
de la semilla era baja, y las plántulas eran muy delicadas y
débiles. De la muestra colectada la mayoría de plantas sembradas se
murió”, comenta.
Infortunadamente
en 2011, en un viaje posterior a la casa donde hallaron la especie,
encontraron que la familia que la ocupaba se había marchado del
lugar, y las plantas estaban destruidas. Lo que hizo el profesor
Morales con los demás científicos del JBB que lo acompañaron fue
recolectar frutos secos y de esa recolecta se lograron plantas. En la
actualidad hay dos plantas sembradas en el Jardín Botánico, y
aunque ha sido difícil mantenerlas, ya están en su segunda
floración.
Si
bien al principio se creía que la especie encontrada compartía
características de la Passiflora
antioquensis,
la confirmación por parte de destacados estudiosos del género como
John Ocampo, profesor de la Universidad Nacional de Colombia,
ratificó la intuición de que se trataba de la Passiflora
cremasthanta.
Importancia
del hallazgo
Tal
como lo señalan diferentes académicos e investigadores, el país
cuenta con la mayor diversidad de pasifloras, aproximadamente 165,
de las cuales cerca de80 producen frutos comestibles. Entre ellos se
encuentran: la granadilla, del cual Colombia es el principal
productor mundial, la curuba, la gulupa, el maracuyá y la badea,
entre otros.
Este
es un hallazgo botánico significativo desde varios puntos de vista:
porque se recupera una especie que se creía extinta, y por los usos
que se le pueden dar entre los que se encuentran el ornamental, el
alimenticio, pues son consumibles y comercializables nacional e
internacionalmente, y el de mejoramiento de otras especies.
De
igual manera es significativo porque a la diversidad existente de
especies de la familia Passifloraceae en Colombia, conocidas como
frutas de la pasión, vuelve a la lista una que en los libros de
investigación se reseña como amenazada.
Particularmente para el
Jardín Botánico José Celestino Mutis este hallazgo consolida la
naturaleza de la institución de Centro de Investigación y
Desarrollo Científico, y ratifica la rigurosidad de las
investigaciones en especies del género Passiflora
que se desarrollan allí desde hace varios años, comola
P.cumbalensis,
la P.
antioquensis,
la P.
cuatrecasarii, la P. lanata yla P. crispolanata,
entre otras.

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por su comentario.
Si usted está interesado en recibir noticias de nosotros, suscríbase a nuestro informativo.