sábado, 23 de agosto de 2014

Giraldo y cabal, opinión, verdad y posconflicto

Miguel Ángel Herrera Zgaib1



"Este no es un problema aritmético, no es un problema de sumas y restas...No puede suceder que una víctima que venga a La Habana sea revictimizada..." Humberto de la Calle, desde La Habana.

Opinión y verdad

¿Esa que saluda con una gran sonrisa a las Farc es representante de las víctimas? La congresista María Fernanda Cabal.

"Defiendo la libertad de expresión de las brujas." Senador Roy Barreras.

Ángela María Giraldo, y María Fernanda Cabal, dos mujeres activas en los espacios de la sociedad civil, la una, y la sociedad política, la otra, se muestran sin advertirlo del todo, como abanderadas de lo que podrá ser el posconflicto en Colombia.

Al comenzar el cuarto punto de la agenda pactada entre las Farc-EP y el Gobierno nacional, el asunto de las víctimas, para resolver la negociación de paz, la población en general es impactada por una ráfaga de anuncios presidenciales, que comentan y ambientan la posibilidad de un cercano cese bilateral del fuego, después de la serie de atentados guerrilleros a la infra-estructura, así como el aumento de muertes, incluidos civiles indefensos.

A raíz de la presencia del primer grupo de víctimas de la guerra en La Habana, a la representante que encabezó la lista para Cámara por el Centro Democrático le pareció fácil “señalar” a la también valluna, Ángela María Giraldo por sonreír al saludar a un supuesto delegado de la guerrilla. La prueba incluida en el trino de Cabal, era una foto. El guerrillero resultó ser, en verdad, un negociador del gobierno, Jaime Avendaño.

María Fernanda es la esposa del líder del gremio ganadero, y copartidaria del senador Álvaro Uribe Vélez, quien es el más vocal detractor y enjuiciador del proceso de paz con la guerrilla, y mucho más de su curso actual.

En respuesta a esta mentira, Ángela María, quien cursó la maestría en estudios políticos en la U. Javeriana, donde la conocí, porque fui su director de tesis, hizo la correspondiente denuncia por calumnia e injuria, luego de lo cual vino un encuentro entre las dos, y entonces María Fernanda rectificó su “opinión”. Acción que fue aceptada por la injuriada.

La denuncia se presentó ante la Fiscalía, pero, éste es un delito que admite desistimiento, así la causa penal deberá terminar. Sin embargo, la representante Cabal encontró normal "opinar" sobre un encuentro, que ella prejuzgó a la ligera llevada por el velo de la ignorancia ideológica.

La afectada es la hermana del diputado valluno, Francisco Giraldo, muerto en la acción criminal, en la que perdieron la vida 11 diputados, bajo la responsabilidad de las Farc, que los sustrajo con engaño del recinto de la asamblea departamental en la ciudad de Cali. Como resultado de esta acción en la guerra bestial que destruye a Colombia, desde, cuando menos, desde los años 46/47, falleció también el padre de los Giraldo, que no se repuso de la dura suerte vivida por su hijo.

La sonrisa de Ángela María

La sonrisa de Ángela María, que para el presidente Santos tiene que ver con la interpretación de quienes "destilan odio," va en contravía de la reconciliación; y para María Fernanda, politóloga formada en una prestigiosa institución bogotana, es dizque el fruto de un derecho, la libertad de opinión que la autorizó a decir: "Esta víctima saluda a las Farc muy contenta... ¿Síndrome de Estocolmo?".

Para sorpresa de muchos, para el senador vallecaucano Roy Barreras tal conducta se encuadra en la libertad de expresión. Lo cual es otro despropósito, más proviniendo de quien se solaza, y enorgullece a menudo de ser el ponente de una ley que rectifica la situación de las víctimas y el despojo de la tierra hecha impune y recurrentemente.

Este episodio que pasó de las redes sociales a las redes de la justicia colombiana, por sobre todo, primero, reclama atención y respeto a la relación que existe entre la intimidad de las personas, y la exterioridad de sus conductas. Claro está, en el contexto de la negociación de paz que se adelanta, esto parece ser un “lujo insoportable” para mentes y corazones sectarios.

Bajo la tensión real entre víctimas y victimarios, la disposición para transformar los horrores de la guerra con verdad es un laberinto lleno de monstruos. Y luego de descubierta la mentira, en los trinos, a otros partidarios del comportamiento de María Fernanda y el estilo pugnaz del Centro Democrático, el partido de la reacción, les pareció fácil hacer asociaciones libres, censurando que Angela María hubiera sido la novia del hoy ministro del trabajo, y que sea contratista de la presidencia de la república, en la oficina de relaciones internacionales. Como de tal condición se derivara el hecho que no podía ser vocera de las mil caras de la violencia política y social que padece Colombia.

Ángela María tuvo como muchos familiares de víctimas, tuvo que cambiar su vida para atender a la desgracia de un acto de la guerrilla. Primero tratando de lograr la liberación de los diputados secuestrados/retenidos, según sea la lectura de los antagonistas en el conflicto; y luego, sabida ya la muerte inexcusable de los diputados, la de su hermano querido, y la de su padre, su compromiso, el de su familia, se orientó hasta hoy con la causa de la paz.

Ella dio testimonio de su disposición para la paz en una sesión especial del III Seminario Internacional Antonio Gramsci, “Liberémonos de la guerra”, en el que hizo escuchar su voz, con la consecuencia que le dicta su convicción que la anima contra viento y marea.

Actores de primera línea
"...facilitar que los desmovilizados puedan reintegrarse a la vida civil..." Mindefensa Juan Carlos Pinzón.

Ángela María, activista de los D.H., en causa propia, como Gustavo Moncayo, el maestro de Sandoná, quien caminó más de 1000 kms, y atravesó 7 departamentos, en reclamo por la causa de su hijo, y de los militares y policías en poder de las Farc-ep,2 individuos, son singularidades que se jugaron contra-corriente; estuvieron dispuestos a sacar a la sociedad civil del papel de títeres de los actores de la guerra, y quienes la aúpan y auparon.

Esto, por fin, ocurre, las víctimas dejan de ser títeres estratégicos. Pero, este episodio empieza a oscurecerse de nuevo. Ahora, con la presencia de 4 militares, coroneles activos, para participar como expertos en la solución de la paz, hace que el expresidente Uribe, sin rigor alguno, llama a esta decisión del presidente, una fórmula de llevarse de La Calle, la condición no deliberante de las Fuerzas armadas.

Sin considerar siquiera, lo que dictan los diccionarios de la lengua castellana. Igual le pasa a la senadora Paloma Valencia, quien repite el mismo estribillo en los medios de comunicación. Deliberar, en su acepción plena implica no solo expresarse sobre algún asunto, sino poder de decidir sobre el mismo.

Al respecto conviene a ambos hacer una lectura seria de lo escrito por Jürgen Habermas sobre la que él denomina democracia deliberativa. Asunto del cual fue un vocero ilustrado el difunto filósofo Guillermo Hoyos Vásquez, y sus más caracterizados continuadores.

La historia presente y pasada

“La presencia de militares en Cuba pone a las Fuerzas Armadas a deliberar, en contra de la constitución.” Senador Álvaro Uribe Vélez.

Con los coroneles está presente en La Habana, el general Javier Flórez, jefe del estado mayor conjunto, a quien los especialistas en los asuntos de la guerra categorizan como “tropero”, líder en las operaciones de guerra contra las Farc, al frente de la fuerza de tarea Omega y Fudra.

Él fue partícipe del operativo en que Alfonso Cano perdió la vida en 2011, en un episodio, que según denuncia de un prelado de la iglesia, fue “ajusticiado” en el lugar donde fuera bombardeado; y también estuvo en la muerte de Raúl Reyes en Angostura.
Dicho de otra manera, quiénes participan, en la resolución de la guerra, y en la disposición para llegar a un cese bilateral del fuego entre los antagonistas, para preparar tanto el episodio del referendo como las condiciones necesarias para actuar el posconflicto, tendrán que aprender y con ellos la nación entera que la pasión por la verdad tendrá que inundar sus corazones y mente.

Tampoco bastará la comisión de historiadores del conflicto armado y sus víctimas, de los cuales, en verdad, los practicantes de esta disciplina, quienes a lo sumo son dos, según los listados, producir un documento riguroso. Ellos tendrán, igualmente, que sacar junto a sus saberes lecciones del episodio ya conocido de Ángela María y María Fernanda.

Decantar en pluralidad el odio y los prejuicios en ese documento que producirán al cabo de cuatro meses en el que se promete no la verdad sino la exploración de las causas de la guerra colombiana que consumió más de medio siglo. Y retomar la heroica marcha, ejemplar, del maestro de Sandoná, de quien no pocos han perdido su recuerdo.


1 Profesor asociado, U. Nacional; ex rector Universidad Libre. Director del Proyecto “La Otra tercera vía y la Cuestión Meridional en Colombia”, Programa de investigación Historia Política y Socio-Cultural de los Grupos y Clases Subalternas en Colombia y los Andes Suramericanos. Email: presid.y.partic@gmail.com; seminario.internacional.gramsci.blogspot.com

2 Ver “El 28 de mayo y el presidencialismo de excepción en Colombia”. Unijus/Unal. Bogotá, 2007, p. Tomado de 36.Edición N° 00413 – Semana del 22 al 28 de Agosto – 2014 Caja de Herramientas


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