El pasado 7 de marzo, en el marco de la conmemoración del día internacional de los derechos de las mujeres, en la ciudad de Bogotá, se puso en marcha por parte de la Secretaría Distrital de la Mujer, Cultura, Recreación y Deporte, Salud y Transmilenio un plan piloto para contrarrestar la violencia física y sexual contra las mujeres que se comenten a diario en los articulados. Una parte de la medida, quizás la más visible, consistió en la destinación de un vagón exclusivo para mujeres, en los buses que cubren la ruta F23-J23, que conecta el occidente de la ciudad con el centro, durante la Hora Valle[1].
De acuerdo al compromiso que la Bogotá Humana adquirió con la ciudadanía, se informan los resultados preliminares del ejercicio de monitoreo desarrollado en la primera, de tres etapas de evaluación, realizada los días 7 y 10 de marzo:[2]
ACCESO EXCLUSIVO OPTATIVO PARA MUJERES
- Se encuestaron 1.921 personas, sobre el conocimiento de la acción afirmativa de acceso especial de mujeres al vagón preferencial, al cual también ingresan personas con discapacidad y adultos/as mayores.
o Tres de cada cuatro personas refieren conocer la acción afirmativa dirigida a las mujeres. Y 7 de cada 10 mujeres y 6 de cada 10 hombres manifestaron estar de acuerdo con la medida.
o En total el 72% de las personas encuestadas le confiere a la medida atributos útiles para la erradicación de estos delitos que vulneran la integridad, dignidad y libertad sexual de las mujeres.
RECONOCIMIENTO DE LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES COMO DELITO
- El 85% de las mujeres considera que es un delito manosear a las mujeres, en tanto que para los hombres esta proporción llegó al 76%.
- Es una alerta para la Administración y la ciudad que un 15 % de mujeres y 24 % de hombres consideran estos actos apenas reprochables, incluso normales.
- Respecto a los piropos, se encontró una mayor permisividad, en tanto que el 36% de las mujeres y el 43% de los hombres consideran que es algo normal, el 49% de ellas y el 46% de ellos dicen que es algo apenas reprochable y tan solo el 13,61% y el 9,53% respectivamente, lo califican como delito.
- El 77% de las mujeres y el 69% de los hombres encuestados, reconocen el exhibicionismo como un delito.
El 75% de las personas encuestadas, expresó hacer uso diario del sistema Transmilenio, de modo que la relevancia de sus opiniones y manifestaciones es incuestionable.
Así mismo la Secretaría de la Mujer en alianza con algunas organizaciones de mujeres,[3] ha realizado una observación participante al piloto, con el fin de identificar el cumplimiento de los compromisos institucionales pactados, a la fecha se reportan los siguientes hallazgos:
- La señalética de la acción afirmativa se encuentra presente, sin embargo es necesario mayor visibilización, en las estaciones de la ruta F23-J23.
- La frecuencia de las rutas se cumple según lo establecido, lo que deriva en que se presente poca aglomeración en las plataformas y estaciones en las horas en que se realiza la observación.
- Se destaca la presencia permanente de Misión Bogotá informando sobre la acción afirmativa en las estaciones. Instamos a la Policía, personal de Transmilenio y Gobierno a contar con personal de manera sistemática para el acompañamiento de la medida.
- Es necesario fortalecer la presencia institucional después de las 7:30 p.m. para garantizar el piloto
- Se requiere que en las estaciones y portales del Sistema Transmilenio, se divulgue la Campaña de prevención de las violencias contra las mujeres en el transporte público.
Por lo anterior, la Bogotá Humana continua adelante con la implementación del piloto, y con el monitoreo de las percepciones de mujeres y hombres en el espacio de intervención, la decisión se sostiene en la percepción cotidiana de las personas, así, si la medida continua siendo de buen recibo entre quienes hacen uso del sistema de transporte y mantiene su efectividad, se estudiará la posibilidad de replicar gradualmente el piloto en otras rutas.
El compromiso con las mujeres en esta ciudad, con la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, la equidad de género, la libertad, la democracia y con todas aquellas personas que anhelan y merecen mejores condiciones de vida, sigue intacto. Las responsabilidades con la construcción de una Bogotá más humana para todas y todos persisten, el propósito se mantiene, porque cada vez que avancen las mujeres, avanzará Bogotá.
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