Ante la permanente migración de vendedores informales durante la época decembrina al corredor vial de la Carrera Séptima, la Plaza de Bolívar y el Parque Nacional, la administración distrital, a través de un grupo interinstitucional a cargo de la Secretaría de Gobierno, Secretaría de Movilidad, Fopae, Ipes, Bomberos, Policía Metropolitana y las alcaldías locales de Candelaria y Santa Fe, evaluó la situación y concluyó que el uso y operación de varios elementos para la producción de alimentos representa un alto riesgo para la seguridad de los ciudadanos y ciudadanas que a diario visitan el alumbrado navideño.
De acuerdo a la normatividad existente para el tema de aglomeraciones (Ley 192 de 2011), el uso de pipetas de gas, estufas a gasolina y bombas de helio por parte de los vendedores ambulantes, representa un alto riesgo para quienes transitan por los mencionados lugares, debido a que no ofrecen ni se garantizan las condiciones mínimas de seguridad para ejercer su actividad en los sitios de alta concentración de personas.
El alcalde local de La Candelaria, Edilberto Guerrero; el mandatario de la localidad de Santa Fe, Carlos Borja, los organismos de control y las autoridades distritales, trabajan en un plan de contingencia y prevención para contrarrestar esta problemática. De acuerdo con el alcalde Guerrero, “lo más indicado en este caso es aplicar el principio de oportunidad y de esta forma evitar choques e inconvenientes con los vendedores informales.”
Con el fin de minimizar los riegos, la administración distrital ha tomado algunas medidas preventivas como la instalación de 750 carpas ubicadas en sitios estratégicos de la ciudad y protegidas por el grupo de Gestores de Convivencia de la Secretaría de Gobierno. Por su parte, el Ipes ha organizado y autorizado a 320 mil vendedores que sí cumplen con medidas y condiciones exigidas por el distrito para que desarrollen su actividad comercial.
El Secretario Distrital de Gobierno, Guillermo Alfonso Jaramillo, insistió que los centenares de cilindros de gas, estufas a gasolina y bombas de helio que utilizan los vendedores informales, representan un gran riesgo para quienes se desplazan hacia el centro de la ciudad con el fin de disfrutar los alumbrados navideños ubicados en los corredores viales de la Carrera Séptima, la Plaza de Bolívar y el Parque Nacional.
Manifestó que las autoridades distritales han activado toda una operación que permita neutralizar el ingreso de los vendedores a dichos sitios, identificar y hacer respetar las zonas de evacuación en caso de cualquier eventualidad y disminuir los riesgos que genera esta actividad para los bogotanos que visitan los alumbrados navideños. De acuerdo con la administración distrital cerca de ocho mil vendedores estacionarios han migrado durante los días de navidad de las diferentes localidades a los sitios turísticos mencionados.
El alcalde local de La Candelaria, Edilberto Guerrero; el mandatario de la localidad de Santa Fe, Carlos Borja, los organismos de control y las autoridades distritales, trabajan en un plan de contingencia y prevención para contrarrestar esta problemática. De acuerdo con el alcalde Guerrero, “lo más indicado en este caso es aplicar el principio de oportunidad y de esta forma evitar choques e inconvenientes con los vendedores informales.”
Con el fin de minimizar los riegos, la administración distrital ha tomado algunas medidas preventivas como la instalación de 750 carpas ubicadas en sitios estratégicos de la ciudad y protegidas por el grupo de Gestores de Convivencia de la Secretaría de Gobierno. Por su parte, el Ipes ha organizado y autorizado a 320 mil vendedores que sí cumplen con medidas y condiciones exigidas por el distrito para que desarrollen su actividad comercial.
El Secretario Distrital de Gobierno, Guillermo Alfonso Jaramillo, insistió que los centenares de cilindros de gas, estufas a gasolina y bombas de helio que utilizan los vendedores informales, representan un gran riesgo para quienes se desplazan hacia el centro de la ciudad con el fin de disfrutar los alumbrados navideños ubicados en los corredores viales de la Carrera Séptima, la Plaza de Bolívar y el Parque Nacional.
Manifestó que las autoridades distritales han activado toda una operación que permita neutralizar el ingreso de los vendedores a dichos sitios, identificar y hacer respetar las zonas de evacuación en caso de cualquier eventualidad y disminuir los riesgos que genera esta actividad para los bogotanos que visitan los alumbrados navideños. De acuerdo con la administración distrital cerca de ocho mil vendedores estacionarios han migrado durante los días de navidad de las diferentes localidades a los sitios turísticos mencionados.
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