domingo, 30 de junio de 2013

Cárcel Distrital celebra el Día del Guardián

Con una ceremonia religiosa, los guardianes de la Cárcel Distrital de Varones y Anexo de Mujeres, dieron inicio a la celebración del Día del Guardián. Posterior al acto litúrgico, fue ofrecido un desayuno amenizado por el grupo Son Cubano, integrado por auxiliares de la Policía.

El director del centro carcelario, Jorge Arturo Lemus, resaltó la labor que cumplen las mujeres y hombres que prestan su servicio a la institución y señaló que “esa labor loable merece un reconocimiento de la ciudadanía, tener que impartir disciplina no es fácil, tener que trasnochar no es fácil, su labor es meritoria y es lo más importante para una cárcel”.

La Dirección de Gestión Humana de la Secretaría Distrital de Gobierno se hizo presente con un detalle para cada uno de los funcionarios homenajeados, el cual fue recibido con beneplácito por los integrantes de la guardia.

De los 154 guardianes que tiene la cárcel, 21 son mujeres, de las cuales la más antigua es Rosa María Arias, quien lleva 33 años al servicio de la institución carcelaria y es la única mujer que ostenta el grado de Teniente, obtenido hace seis meses. Rosa María llegó a la Cárcel con 18 años y en ese momento fue la única mujer, entre un grupo de quince personas, que entró a trabajar allí. Trascurría el mes de marzo de 1979.

En la cárcel conoció al hombre con el que se casó hace 14 años, juntos comparten el mismo trabajo. Dentro de sus vivencias en el centro carcelario hay recuerdos buenos y malos, pero ella prefiere mantener en su mente las cosas positivas y que le han generado satisfacción, como enseñarle a leer a las personas privadas de la libertad y recibir el agradecimiento de las mismas.

Entre  sus planes está ejercer la enfermería cuando salga pensionada, es una carrera que estudió hace algunos años y que piensa le servirá para ayudar a otros, como lo ha venido haciendo en la Cárcel Distrital.

Rosita, como la llaman sus compañeros, fue enfática en afirmar: “Este fue mi primer trabajo, aquí pase mi juventud, es la herencia de mi padre, quien también trabajo aquí en la parte administrativa, él me enseñó la disciplina, el orden, la responsabilidad, el compromiso, la honestidad y el amor por los demás, quiero ser ejemplo para la guardia femenina y dejar un legado para ellas”.

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